En la universidad de los Andes, la amistad funciona como un eje generador de comunidad entre los estudiantes de pregrado. Bajo esta premisa un individuo ser amigo casual, amigo de rumba, amigo académico, y el más amigo. Los actores establecen que una comunidad se reconoce cuando se percibe en el otro individuo, las cualidades que se le atribuyen a un más amigo, las cuales giran en torno a la confianza principalmente. A partir de este valor se desprenden otros, como, lealtad, responsabilidad, incondicionalidad, accesibilidad y fiabilidad, dando origen a la empatia. Dos de estos roles, el amigo de rumba y el amigo académico se ven muy limitados a los espacios donde se suelen asumir (rumba y el estudio ) por lo cual casi nunca logran llegar al ideal del más amigo. Dado que el concepto de confianza es desigual para estos cuatro roles, se ha dificultado la construcción de una comunidad; esta tarea se le delega a los amigos de rumba y académicos ya que de ellos depende ampliar su confianza al nivel esperado. No obstante, el gran obstáculo que éstos enfrentan es la falta de interés frente a los demás, que se clasifican como diferentes a sí mismos y por tal no son apropiados para ocupar la posición de un “más amigo”